Nunca he dado mi virginidad anal a ningún hombre, no todavía.
¿Me han introducido sus dedos mientras me ponían a cuatro patas y me follaban duro? Sí. Y ¿Me ha gustado? Por supuestísimo que sí. Pero nunca he dejado que una polla real entre ahí y me llene.
No me preguntéis por qué, pero siempre he sentido que mi culo sólo pertenecerá a una clase de hombre.
Besos,
Elisa.
Me encantaría correrme en esa rajita y extender mi semen por ella con la punta de mi polla.
ResponderEliminarMe encanta cuando me decís esas cochinadas.
EliminarYo lo llenaría de azotes... alternados con besos bien lentos en el agujerito.
ResponderEliminarEspero que no seas rudo, se pone rojo de una simple palmadita de nada.
Eliminar¿Rudo? Nunca, honey... apenas unos azotitos para que se ruborice su precioso culo y se pique un poco la dueña del susodicho, pero siempre con mucho mimo. Con el mismo cuidado con el que le daría generosos lametones aquí y allá. Con el mismo cariño con el que le preguntaría "¿donde...?", mirándola a los ojos, poco antes de correrme...
EliminarMe encantaría desde luego lamer esa rajita, e iré separando tus nalgas bien agarradas hasta llegar al centro y recrearme. Y me encantaría tenerte a 4 patas delante de mi boca y recorrer mil veces el camino entre tu coño y tu culo.
ResponderEliminarAhora bien, cuando esté chorreando entre tus fluidos y los mios querría que lubricaras bien mi pene con tu boca para después sentir como es introducirse por tu ano.
Así que no puedo evitar preguntarne... A qué clase de hombre pertenecerá tu culo?
(Y no puedo entender cómo soy el primero en preguntar eso =P)
qq
Al adecuado mi querido pervertido, a alguien que se lo gane a base de bien.
EliminarMi culo es un tesoro, sólo para el que considere el más digno, en todos los sentidos... y lamentablemente ese hombre aún no ha llegado a mi vida.